jueves, 24 de noviembre de 2011

THE ALAN BOWN SET PARTE 3: UN PASO EN FALSO

Tras las maravillas que el grupo regaló en su período psicodélico, una nueva vuelta de tuerca estilística sacudió los cimientos de los Alan Bown! en su intento de no perder el pulso del momento y de seguir publicando discos que combinasen su pericia innata y un sonido contemporáneo. Pero su segundo LP en estudio, THE ALAN BOWN!, no supuso nada de eso.
Publicado en 1969 en el sello "progresivo" de Decca, Deram, era un artefacto lleno de piezas que ya habían sido probadas en directo y que tenía las miras puestas más allá del soul, el pop y el rock que tan bien manejaba la banda, con elementos folkies, hippies e incluso una postura cercana a la teatralidad en una larga pieza, una suite que narra una historia a lo largo de la misma titulada The Prisoner (¿un guiño a la serie televisiva británica que había finalizado unos meses antes?) con un éxito más que dudoso.
Una vez terminado de registrar el disco aconteció la debacle con el abandono de Jess Roden, no sin antes haber publicado el roquero pero olvidable single Still As Stone/Wrong Idea. La cara A, escrita por el propio Roden, fue un pequeño fracaso que agravó la situación personal del cantante en la banda.
Para sustituirle el propio Alan Bown en persona viajó en busca de un joven norteño llamado Robert Palmer, que añadió su voz a las grabaciones sustituyendo la de Roden, con buenos resultados en su intento de emular al desertor pero sin deslumbrar y con poca aportación propia, pero un inmenso talento como demostraría posteriormente en Vinegar Joe y en su carrera en solitario.
El disco comienza estupendamente con My Friend, un tema lleno de groove y potencia en la que la base rítmica, el órgano y los metales interactúan a la perfección, un single en potencia que quizá hubiese tenido un impacto relevante en las listas. Y Robert Palmer emula casi a la perfección al añorado Jess Roden! Strange Little Friend parece seguir esa línea, un tema más relajado, más pop y "americano" con cierto regusto a los Blood, Sweat & Tears con un bonito piano, siendo el final de la pieza más experimental y jazzístico. Similar sonido encontramos en Elope, encantadora composición de relajado ritmo y amables intenciones, al que le sigue la Harrisoniana Perfect Day, nada del otro mundo y que junto a la anterior impone al disco un ritmo peligrosamente lento, destacando sólo el trabajo de Palmer, en un registro similar al de Terry Reid. Y esa tendencia sigue con la casi acústica y aburrida All I Can Do, en la que toman las voces el guitarrista Tony Catchpole y el batería Vic Sweeney, para volver a terrenos más jazzroqueros y decididamente más entretenidos con Friends In St Louis, antes de dar paso a la suite The Prisoner, un sinsentido de 10 minutos lo más alejado posible de lo que mejor se le daba a la banda, un intento de mini-ópera rock que tan bien dominaban los Who pero que en el caso de los Alan Bown! llega a rozar en ocasiones el ridículo!
Kick Me Out es un tema pastoral de ritmo cansino con cierto aire al segundo disco de Humble Pie aunque no se beneficia en absoluto del trombón incluido. El disco parece remontar un poco conforme se acerca su conclusión con la soulera Children Of The Night y la animada Gypsy Girl, un tema que parece haber sido compuesto pensando en los singles de Manfred Mann de 1967 y 1968. Este tristemente anodino disco se encuentra
reeditado en CD por Esoteric Recordings con el añadido del single Still As Stone/Wrong Idea. El disco no tuvo nada de impacto y el tour norteamericano contratado con Roden aún a bordo fue cancelado, hiriendo mucho a la banda ya que el directo era la situación en la que mejor demostraban sus poderes. Palmer, por su parte, tras completar la grabación de nuevas canciones destinadas a formar parte del siguiente disco, el excelente LISTEN, abandonó en busca de nuevas aventuras dejando a la banda en la misma situación que cuando les dejó Roden, como ya vimos en su momento.
En posteriores y excitantes capítulos viajaremos al pasado de la banda, a sus orígenes y a aquellos temas y frenéticos conciertos donde primaba el soul y que les convirtieron en unos iconos mod!
David

3 comentarios:

Anónimo dijo...

No me cansaré de halagar lo bien que escribes.
Tengo que escuchar este disco de los Alan, aunque después de leer tus exhaustivos comentarios, no sé si se tiene o se debe escuchar.

Fanzine Making Time dijo...

Gracias por el comentario, pero no es para tanto...
El disco es el más flojo del grupo, pero por supuesto hay que escucharlo...

Anónimo dijo...

Pues ya me lo pasarás, a ver qué tal! El otro que me dejaste de los Alan era estupendo, una "joya de la corona".